DIOS ESTA CONTIGO EN EL DESIERTO.

Si por cada momento que me he sentido afligido y triste, sin nada de fuerza me hubiese derrumbado vencida y acabada, no estuviera en el momento de mi vida que me encuentro ahora. 

Son muchos los momentos de mi vida donde nada ha salido bien y donde parecía que Dios no estaba conmigo, pero mi querido hermano mi fe y convicción en Dios fueron más fuerte que mi situaciones.

Lo que estoy queriendo trasmitirte mi querido hermano es que cada ser humano en esta tierra pasa por momentos de angustias, tristeza, momentos difíciles, donde se nos apaga la vida y nada tiene sentido para continuar adelante, donde el sol ya no sale mas ,donde todo nos parece sin sentido.

En el evangelio se le conoce como desiertos, y tengo por convicción que después de un desierto viene  un momento de cosecha, pero todo depende con que entereza enfrentaste tu desierto.

Tú que estás leyendo este mensaje al otro lado de la pantalla de tu monitor, quizás estas enfrentando un desierto en este momento, y sé que a lo mejor no creas que puedes salir de ese hoyo donde te encuentras , pero mi querido y amado hermano Dios te da fuerzas para que te levantes y sigas luchando.

Pon tu fe en Jesús, él es quien te guiara a seguir adelante y te ayudara a salir del desierto donde estas sumergido.

Es en el  desierto cuando más vemos la mano de Dios obrar en nuestras vidas, es allí donde los verdaderos guerreros del señor le demostramos cuanto amamos a nuestro DIOS.

Mi amado hermano  no tengas más miedo, no dudes mas, no te rebeles en contra de tu creador. Nuestro padre celestial, Dios no te abandona el está a tu lado para cuidarte guiarte y  después de pasar tu desierto todo será mejor.

HAGAMOS UNA  ORACIÓN AL PADRE.

Mi adorado y amado padre celestial: si algún momento no fui lo que tú deseabas, si en algún momento de mi vida te he ofendido, te pido desde lo más profundo de mi corazón que me perdones. Vengo hoy ante ti humillada en oración y sé que tú me levantaras de este desierto , yo pongo todas mis fuerzas en creer que solo tú eres la solución a mi vida, porque has permitido que este viva y a pesar de tanto dolor tu con remanso suave me mandas estas palabras de vida.

Amen ¡